Me hubiese dejado la piel en el intento, pero a veces hay que darse cuenta de que antes que tú ya hubo alguien que se caló hasta los huesos.
Y por eso, ya me ves, estoy aquí parada. Quieta. En silencio. Escondiendo en el bolsillo la ciudad que guardaba para ti. Esperando que pongas la música bien alta y pueda salir de aquí sin dejar de pisar fuerte.
2 comentarios:
Qué descubrimiento este lugar!!
Me gustan mucho decoración y luces.
¿Alquiláis habitaciones?
¿Se puede conocer a la casera?
Para los versos de combustión lenta se aceptan sugerencias, pero aviso, soy muy exigente.
En la misma confianza te confieso que si me dijiste en persona que te pasabas a melancoholizar periódicamente no lo recuerdo. Y normalmente el número de visitantes que lo rompen su anonimato es inferior (bastante) a cienmil a la semana.. jajajaja. Vamos, que creo que me acordaría. Necesito ponerle cara a mi compañera de piso.
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